La comida en Eslovaquia es sana y bastante pesada. Las patatas, la carne, el queso de oveja y las albóndigas son la base de muchos platos y a menudo se acompañan de col (chucrut). Las carnes más populares en la cocina eslovaca son el cerdo, la carne de vacuno y el pollo. La morcilla «krvavničky» y la salchicha ahumada picante «klobása» también son comunes junto con las carnes de caza como el jabalí, el conejo y el venado. En este artículo te vamos a mostrar algunos de los platos de comida típica de Eslovaquia que debes probar.
Bryndzové Halušky (dumplings con queso de oveja)
Es la comida nacional de Eslovaquia, por lo que si sólo puedes probar un plato en el país sin lugar a dudas debe ser esta. Una combinación mágica de queso fuerte y albóndigas, generalmente con un poco de tocino ahumado y salchichas encima. La porción de halušky (albóndigas de patata similares a los ñoquis italianos) es omnipresente en la comida eslovaca.
Kapustnica (sopa de col)
Esta sopa de col eslovaca es un básico de la cena tradicional navideña. Aún así, se puede encontrar como un entrante durante todo el año. Se mezcla el chucrut con una base cremosa con patatas cocidas, jamón picado, champiñones, pimienta negra, pimentón y ajo. Se sirve caliente y con un pan recién horneado.
Gulášová Polievka (sopa goulasch)
No es necesario hablar eslovaco con fluidez para entender lo que significa Gulášová, ¿pero polievka? Sopa, eso será sopa. El gulasch es un campeón regional, y Eslovaquia abraza el lado carnoso de las cosas por encima de las albóndigas. En Eslovaquia, suele consistir en carne de vacuno, cebollas, patatas, pimientos, tomates, ajo y una mezcla de especias.
Bryndzové pirohy (pierogis relleno de bryndza)
Tanto el queso Brinza como los pierogis son un clásico de la comida polaca que también se puede apreciar en la cocina eslovaca. Los eslovacos rellenan estas albóndigas de patata con queso bryndza, untan crema agria por encima y con trozos de tocino frito. Se suele acompañar con un vaso de žinčica (leche de oveja agria). Tiene un sabor fuerte y fermentado, por lo que no es para todos, pero definitivamente vale la pena probarlo.
Vepřo knedlo zelo (cerdo con albóndigas y col)
Este plato clásico eslovaco es una combinación de trozos de cerdo, cubierto con ajo, acompañado de col estofada y knedle (albóndigas de pan). El Knedle es un tipo diferente de albóndiga – se parece a una barra de pan. A menudo se le sirven tres o cuatro piezas con su cerdo. La albóndiga es muy suave y delicada, y absorbe los jugosos sabores de la carne y el ajo, haciéndola irresistible.
Trdelník Skalický (pastel eslovaco)
Aunque sea muy popular en Praga (República Checa), la receta original procede de una pequeña ciudad eslovaca de Skalica, desde aún sigue siendo el orgullo. Son especialmente populares en invierno, servidos calientes con una taza de vino caliente. El azúcar y la canela se funden delicadamente en la boca, y el pastel te da energía para pasar horas caminando por el casco antiguo de Bratislava. Recientemente, se ha adaptado el pastel para servirlo también en verano, donde el pastel se rellena con helado de vainilla.
Vyprážaný syr (queso frito con patatas fritas y salsa tártara)
Permite que el niño interior que hay en ti brille mientras disfrutas de esta delicia completamente insalubre pero deliciosa. Este plato es perfecto después de haber pasado horas remando por el río Hron o descendiendo por un desafiante sendero en los Tatras. El tipo de queso utilizado es típicamente el Edam, y los encurtidos suelen acompañar este plato para embellecer los sabores salados.
Vyprážaný rezeň (schnitzel)
Aunque el schnitzel es más popular y conocido en Viena (Austria), también es un plato común y típico de Eslovaquia. Este plato de carne de cerdo empanado lo encontrarás en casi todos los restaurantes con diferentes variedades. Primero se ablanda una loncha fina de cerdo y luego se fríe con pan rallado. Una ensalada de papas a base de mayonesa a menudo se sirve como acompañamiento. Si quieres que tu experiencia de schnitzel suba de nivel, pide bačovský rezeň, que es un schnitzel cubierto con jamón y queso derretido.
Zemiakové placky (panqueques de patata)
Este plato es el típico que se da a los niños como merienda después de volver de la escuela, aunque también se suele servir como acompañamiento de otro plato. Los mejores panqueques de patata se fríen en aceite de buena calidad y son crujientes por fuera pero pegajosos por dentro. Se deben consumir calientes con crema agria, kéfir o leche agria.
Slovenske palacinky (panqueques eslovacos)
Estos panqueques eslovacos es el postre más popular del país. Es sencillo, son crepes con todo tipo de relleno que te puedas imaginar. Es un sabor mágico cuando se sirven calientes y con capas de mermelada de albaricoque casera. Estos finos crepes también se pueden acompañar con mermelada de fresa, azúcar en polvo, avellanas para untar o canela.
¿Qué te ha parecido la comida típica eslovaca? Esto no es todo, puedes leer más sobre los países de Europa en nuestra web. Aunque los platos eslovacos sean exquisitos, te recomendamos descubrir más sobre los platos típicos europeos. ¡A comer!