El turismo puede ser una gran oportunidad para viajar al pasado. El norte español goza de un gran legado cultural y artístico, pero además, cuenta con paisajes donde el mar y la montaña se entremezclan en rincones urbanos verdaderamente mágicos. La oferta cultural que puede encontrarse en las principales ciudades septentrionales es de lo más variada. Sus visitantes pueden hacer turismo gastronómico, practicar deportes de montaña, de mar, asistir a eventos culturales como festivales de cine o también pueden disfrutar de la experiencia de jugar al bingo online en las salas más populares de España.
Y es que no importa si sólo se trata de bingo. Éstas tres ciudades desprenden magia por todos sus costados y se han convertido en destinos imprescindibles.
San Sebastián
Adquirió gran popularidad entre la aristocracia hacia la segunda mitad del siglo XIX cuando se erigió como uno de los destinos predilectos de la reina Isabel II. Con el paso del tiempo se ha convertido en una de las ciudades españolas más populares a nivel internacional. San Sebastián constituye uno de los enclaves más prestigiosos del mundo en lo que respecta al mundo del séptimo arte, acogiendo festivales de cine tan reconocidos como el Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Bajo una estética francesa y salpicada por matices aburguesados, cuenta con un esqueleto urbano en el que arquitectura y mar se entrelazan en paisajes únicos.
En su oferta de juegos de ocio también se destaca por sus casinos de señorío entre los que destacan el Gran Casino de San Sebastián. Si bien por fuera pareciera un palacio antiguo, por dentro la exclusividad y elegancia han albergado en su pasado a familiares de la realeza como la reina María Cristina y sus infantes. Cuando de juegos de bingo online se trata, las salas de juego como las que posee el Bingo Londres son el lugar favorito de los jugadores del norte. Con capacidad de hasta 450 jugadores, cuenta con cartones de 2€ y se han llegado a cobrar premios de hasta 23 mil euros.
Barcelona
Hacia la década de los años noventa adquirió una mayor afluencia turística con su remodelación y su apertura al Mar Mediterráneo para la celebración de los Juegos Olímpicos. Si por algo se caracteriza Barcelona es por ser una ciudad construida por y para el arte. Es la segunda ciudad más habitada de España, tan sólo por detrás de Madrid y por lo tanto posee una oferta cultural y de ocio diversificada y rica. La popular Ciudad Condal se alza además como una de las ciudades más visitadas de todo el continente europeo.
Uno de sus principales atractivos es su amplia variedad de edificaciones icónicas. Entre sus calles es posible encontrar una exquisita fusión de corrientes que van desde el modernismo de Antonio Gaudí hasta el románico, el gótico o el contemporáneo.
Enclaves obligatorios son la Sagrada Familia, el Parque Güell, el Barrio Gótico, la Catedral de Santa María del Mar, Casa Batlló, La Pedrera, Plaza Catalunya o el Palau de la Música Catalana.
En la capital catalana, además puedes jugar al bingo, siendo uno de los más famosos el conocido como Bingo Billares ubicado en el distrito de L’Eixample. En el pasado era frecuentado exclusivamente por mujeres de clase alto, hoy puede albergar a gran cantidad de jugadores que prefieren dejar el bingo online de lado para presenciar el juego en vivo.
Pamplona
Si bien la apuesta de bingo en la ciudad de Pamplona no es tan extensa como en el resto de las ciudades que hemos revisado. Esta actividad de ocio tuvo su apogeo en la época de los 80 y se centró por sobre todo cerca del Barrio Iturrama y la zona de Pio XII, donde se mantiene hasta la actualidad.
Pamplona, fue la capital del legendario Reino de Navarra, algo que a día de hoy sigue otorgándole un inconfundible sabor medieval. Su legado cultural continúa siendo un elemento característico de la identidad nacional. Sus reliquias arqueológicas, sus construcciones datadas en el siglo XVI o la celebración de los Sanfermines, que a día de hoy siguen copando los noticiarios internacionales. Pamplona tiene un carácter único.
Santa María la Real conforma uno de los constructos catedralicios españoles más complejos. Ubicada en el antiguo centro de la ciudad Pompaelo de origen romano fue destruida con la invasión árabe y desde entonces se levantaron dos construcciones distintas que volvieron a derrumbarse. No fue hasta el siglo XIV que se inició la construcción de la edificación actual bajo una fusión de gótico y neoclásico.
Algunos de sus rincones más bellos se distribuyen alrededor de más de 3.000 millones de metros cuadrados de zonas verdes. El Parque Vuelta del Castillo, la Taconera, Yamaguchi, Media Luna o los campus universitarios de la Universidad Pública y la Universidad de Navarra conforman paisajes urbanos impresionantes. Su verde característico pone voz a una ciudad que quintuplica las zonas verdes frente a la media nacional.